San Miguel Totolapan, Guerrero, se convirtió en el escenario de una cruenta batalla entre los cárteles de Los Tlacos y La Familia Michoacana (FM), desencadenando una guerra que ha dejado un saldo trágico de 17 muertos. La confrontación tuvo lugar en un lugar conocido como Piedra Concha el pasado lunes, según informes de vecinos.
Se reporta que 16 de las víctimas pertenecían al grupo de La Familia Michoacana, liderado por los hermanos Jhonny y José Alfredo Hurtado Olascoaga, mientras que una persona falleció del lado de Los Tlacos, encabezados por Onésimo Marquina. Este enfrentamiento se produce apenas una semana después de que los Obispos de Guerrero intentaran buscar una tregua entre los grupos criminales de la sierra.
El 14 de febrero, el Obispo de la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa, José de Jesús González, había revelado que se llevaron a cabo diálogos individuales con líderes de organizaciones criminales, quienes rechazaron la propuesta de paz. Se mencionó que ambas facciones pactaron la tregua debido a intereses compartidos, como la venta de pollo y el servicio de transporte.
El Cártel de la Sierra, fracción de Los Tlacos, anunció públicamente su intención de atacar al alcalde de San Miguel Totolapan, Fredy Vázquez Palacios, y declaró la guerra contra los líderes de La Familia Michoacana, conocidos como «El Pescado» y «La Fresa». Videos difundidos en redes sociales muestran la violencia extrema, con sicarios de Los Tlacos exhibiendo y calcinando los cadáveres de sus rivales en Las Tunas.
En los videos, los individuos armados, vestidos de verde, ostentan la violencia al disparar contra los cuerpos y prenderles fuego. Habitantes de la localidad de Linda Vista informaron que el enfrentamiento ocurrió después de que el Gobierno retirara a elementos del Ejército y la Policía Estatal que brindaban seguridad en Las Tunas.
La Fiscalía estatal ha iniciado una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado, pero hasta el momento se desconoce la identidad de las víctimas. La situación en la región es crítica, y la violencia entre los cárteles ha llevado a un deterioro significativo de la seguridad en San Miguel Totolapan y sus alrededores.