La noche del jueves, presuntos estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa protagonizaron disturbios en Chilpancingo, incendiando una patrulla de la policía estatal en la avenida Insurgentes. El incidente ocurrió tras un presunto enfrentamiento entre policías estatales y un grupo de individuos que viajaba en una camioneta, dejando una persona muerta y otra herida.
Según informes, los presuntos normalistas llegaron a la capital a bordo de varios autobuses después de que, aparentemente, policías estatales atacaron a balazos a un grupo en el libramiento Chilpancingo-Tixtla, cerca de un hotel. La Secretaría de Seguridad Pública (SPP) emitió un comunicado explicando que, al marcar el alto a una camioneta, los policías fueron agredidos a tiros, respondiendo a la agresión. Uno de los agresores resultó herido, y otro fue detenido. En el vehículo, se encontraron presuntos residuos de drogas y armas.
Trágicamente, se informó que la persona que perdió la vida durante estos eventos, ocurridos después de las nueve de la noche, sería un estudiante de Ayotzinapa. Posteriormente, normalistas llegaron a Chilpancingo y se enfrentaron con policías estatales que viajaban en una patrulla. Los agentes se retiraron ante la confrontación, y como resultado, los presuntos estudiantes incendiaron la unidad policial.
Las autoridades locales se encuentran investigando los eventos y han condenado tanto la violencia inicial como la posterior destrucción de la patrulla. El enfrentamiento destaca la tensión persistente en torno a la escuela normal de Ayotzinapa y pone de relieve la necesidad de abordar de manera efectiva las preocupaciones de los estudiantes para evitar futuros episodios de violencia y conflicto en la región.