La noche del 6 de febrero, una camioneta Urvan de transporte público fue incendiada en la Calle Francisco Villa, Colonia Vista Hermosa, al poniente de Chilpancingo, Guerrero, elevando la tensión en la ciudad que enfrenta una ola de ataques contra transportistas por parte de presuntos integrantes de la delincuencia organizada.
Según testigos, dos individuos a bordo de una motocicleta lanzaron una bomba molotov a la unidad, marcada con el número económico 248 de la ruta Mercado-Rosario Ibarra, que se encontraba estacionada en la mencionada calle. Las llamas se extendieron hasta los cables de alta tensión de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), desencadenando varias explosiones.
El personal de Protección Civil acudió rápidamente al lugar para sofocar el incendio y controlar la situación. Este incidente se suma a una serie de ataques dirigidos contra transportistas en los últimos dos días, generando un clima de inseguridad en la ciudad.
La población de Chilpancingo enfrenta días de tensión, con habitantes evitando salir de sus hogares después de las 19:00 horas debido al temor a hechos violentos. Las principales avenidas del centro de la ciudad, como Miguel Alemán, Juan Ruiz de Alarcón, Ignacio Ramírez, Insurgentes y Juan Álvarez, se han quedado vacías desde la mencionada hora.
La situación ha llevado al cierre anticipado de establecimientos comerciales, bares y cantinas al caer la noche. Además, por tercer día consecutivo, directivos y padres de familia de las escuelas de todos los niveles académicos han decidido suspender las clases presenciales hasta nuevo aviso, en un esfuerzo por salvaguardar la seguridad de los estudiantes.
Las autoridades locales continúan trabajando para abordar la creciente violencia y restaurar la normalidad en la ciudad, mientras la población permanece en alerta ante la persistente amenaza del crimen organizado.