Los hogares mexicanos receptores de remesas captaron 4,681 millones de dólares en marzo, revela información del Banco de México.
El flujo de transferencias superó en 12.6% los envíos que hicieron los trabajadores mexicanos desplazados en el mismo mes del año anterior, cuando también se registró un récord con la entrada de 3,909.98 millones de dólares.
Además esta entrada de los llamados migradólares superó los 3,910 millones que ingresaron en febrero y se convierte en el primer mes del año donde se supera el monto mensual de recepción de 4,000 millones de dólares.
La fortaleza en el flujo de remesas es explicada por “las generosas transferencias fiscales de apoyo a los salarios en Estados Unidos; un nivel competitivo del peso frente al dólar y la profunda contracción de la actividad económica y el empleo en México”, advirtió desde Nueva York el economista para América Latina en Goldman Sachs.
De acuerdo con la información actualizada del banco central, durante el primer trimestre del año el monto acumulado de remesas sumó 12,521 millones de dólares. Una cifra que también superó los 10,615 millones de dólares captados el mismo periodo del año pasado.
El estratega concuerda con expertos del Fondo Monetario Internacional (FMI) que en las pasadas Reuniones de Primavera alertaron el riesgo de una moderación en el flujo de remesas, conducida por una desaceleración en la actividad económica de Estados Unidos, una menor capacidad de compra en aquel país, consecuencia de la inflación interna y el efecto de comparación con el histórico 2021.
De acuerdo con el experto de Goldman Sachs, el fortalecimiento del peso frente al dólar en marzo, más la inflación acotaron la ganancia cambiaria de los hogares receptores de remesas.
Ante una apreciación de 0.9% del peso frente al dólar en comparación anual, las remesas aumentaron solo 3.9% en moneda local y en términos reales. Todavía el mes pasado, las transferencias registraron un crecimiento anual de doble dígito, descontando inflación, de 16.3 por ciento.
Tal como lo han explicado expertos del Centro de Estudios Monetarios de Latinoamércia (CEMLA), los envíos de remesas son captados en pesos mexicanos, la remesadora cambia los dólares originales por pesos y es así como entran al sistema mexicano.
