El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, “quiere personalmente” que su par mexicano, Andrés Manuel López Obrador, acuda a la Cumbre de las Américas, a celebrarse la próxima semana en Los Ángeles; tiene en cuenta la opinión de México y ha mantenido conversaciones “respetuosas” con este país sobre el tema, sostuvo ayer Juan González, director del Consejo de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental.
A sólo cuatro días de la cita, González indicó que la Casa Blanca sostiene conversaciones “respetuosas y activas” con México y otros países, pero aún tiene “consideraciones finales” en relación con el interés del gobierno mexicano para la asistencia de Cuba, aunque su vecino también condicionó la asistencia del presidente López Obrador a que se invitara a Venezuela y Nicaragua.
“Nuestra relación con México es y seguirá siendo positiva,” declaró Juan González, (director del Consejo de Seguridad Nacional para el Hemisferio Occidental) quien agregó que la participación en la cumbre no impactará a la cooperación entre Estados Unidos y América Latina, durante una rueda de prensa telefónica.
Asimismo, sostuvo que la administración Biden tiene la convicción de tratar a los países de la región como “socios” y tratar respetuosamente las diferencias, aunque se reserva el derecho de ejercer sus prerrogativas como anfitrión del evento.
Estados Unidos envió desde hace varias semanas claras señales de que no planea invitar a Nicolás Maduro o Daniel Ortega, pero el político venezolano Juan Guaidó, a quien Washington y otro medio centenar de países reconocen como líder legítimo de Venezuela, sí fue invitado, aunque no está clara la naturaleza de la invitación o si le permitirán hablar ante el resto de líderes.
